Día 30 en Sofía "una bella persona"

Ser compañero de  piso de un gaditano y no dedicar una página de mi blog a la risa y sus beneficios sería, cuánto menos, una falta grave en mi historial. Según un grupo de científicos estadounidenses, de estos de batas blancas y gafas ajustadas con gomilla, una dosis diaria de risa puede ser buena para el corazón porque, al igual que el ejercicio, hace que los vasos sanguíneos trabajen de un modo más eficaz. La sonrisa, el más bello de los gestos, la forma de comunicación más eficiente y expresiva, un elemento de atracción entre las personas y una razón de aproximación. "Es más fácil obtener lo que se desea con una sonrisa que con la punta de la espada" que diría W. Shakespeare.

Existen dos tipos de sonrisas: la normal o estándar (que abarca todos los músculos peribucales) y también la sonrisa Duchenne (que compromete incluso hasta a la musculatura que rodea a los ojos).

Para comprobar ésto se sometió a 169 estudiantes universitarios a tareas de estrés, y después se les pidió cambiar el rostro hacia uno sonriente, ya sea en forma espontánea o fingida: en ambos casos se logró disminuir la sensación de nerviosismo y también el ritmo cardíaco. Con el semblante neutro no hubo variaciones, en cambio con la sonrisa normal sí se registraron cambios positivos. Y lo más importante: la sonrisa de tipo Duchenne ayudó muchísimo más a crear esa sensación de alivio, incluso después de momentos que podían haber sido tensionantes.

Independientemente de si una persona se siente o no feliz, la sonrisa puede ayudar a la gente a retomar el control de las situaciones adversas, y a la larga también sirve para mejorar la salud integral de nuestro corazón. Y vosotros... ¿reid?...

En este sentido estoy seguro que mi experiencia en Sofía, va a engradecer mi corazón, no solamente por las risas que nos echamos si no tambien por las nuevas personas que están haciéndose hueco en él. Entre ellas, el gran "pisha", al que prometí dedicar una de mis páginas del blog. Un gaditano portuense de veinte añitos al que ya le he cogido mushooo cariño. Me gusta ir a su habitación a despertarlo cada mañana, cosa ésta en la que su humor gaditano se torna un poco más malafollado granaino, pero que siempre acaba con unas risas entre Cobo, El pisha y este que os escribe cada noche. Así empezamos los días en Gladstone, con música y esa dosis de risa para poder, de esta manera, tratar de mantenerla durante las siguientes 23 horas. 

La bondad se puede palpar. La bondad se nota en aquellas personas en las que ésta desborda. La sencillez, la tolerancia y sobretodo la transparencia. Eloy (mirad su cara en la foto) tiene esas dosis de cada cosa para ser una gran persona. Habla maravillas de su madre, y de su labor con algunos críos pequeños. De su familia (con la que aún me hago un poco lío). Y de su padre, al que aún no conozco, pero me imagino como alguien bonachón y carismático. Tambien alguna que otra anécdota (de las que me creo la mitad), porque de forma cariñosa, es un poco fantasmilla en ciertos temas. Me gustan las personas que hablan de los que les importan. Aquellas personas que aún lejos, viven con el corazón lleno de ellos y cada día valoran el hecho de saber que te esperan y que te echan de menos. Por la única razón que tú tambien los echas a ellos. Pisha = Una bella persona.