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miércoles, 10 de abril de 2013

Día 18 en Sofía "24 kilates"

Maslow está considerado como el iniciador de la tercera fuerza de la psicología, siguiendo al psicoanálisis (Freud) y el conductismo (Watson). Su jerarquía de las necesidades o Pirámide de Maslow es una teoría psicológica propuesta por Abraham Maslow en su trabajo de 1943. Una teoría sobre la motivación humana, posteriormente ampliada, que formuló una jerarquía de las necesidades del ser humano defendiendo que conforme se satisfacen las necesidades básicas, las personas desarrollamos necesidades y deseos más elevados. Según ésto, dispondríamos de:

- Necesidades fisiológicas básicas. Son necesidades fisiológicas básicas para mantener la homeostasis.
- Seguridad. Surgen de la necesidad de que la persona se sienta segura y protegida
- Afiliación. Están relacionadas con el desarrollo afectivo del individuo, son las necesidades de asociación, participación y aceptación.
- Reconocimiento.Se refieren a la manera en que se reconoce el trabajo del personal, se relaciona con la autoestima.
- Autorrealización. Son las más elevadas, se hallan en la cima de la jerarquía, a través de su satisfacción personal, encuentran un sentido a la vida mediante el desarrollo de su potencial en una actividad. 


Cada uno de nosotros, por sí mismo, trata de auto incorporarse o analizarse para valorar en que grupo de estos se encuentra. En ocasiones, incluso nos mentimos a nosotros mismos, con tal de no ser capaces de aceptar que únicamente tenemos cubiertas las necesidades más primarias y que algunas tan importantes como las de afiliación o reconomiento se encuentran inertes. En mi caso, en una demostración de franqueza, os cuento que me encuentro vivo. Tengo la suerte de reconocerme a mí mismo mi propio trabajo personal, y a la vez sentir que se reconoce mi trabajo profesional. Y ésto, como bien asociaba Maslow, no os podéis imaginar la inyección de autoestima que supone. No hay persona más guapa y más esbelta que aquella que sabe valorarse a sí misma. 

El fútbol, me hizo mirar de nuevo a la mía Patria, para ver, delante de una mesa llena de buena comida y la grata compañía de nuestra profe, de Gergana y de Asia, como el Barça pasaba a la semifinal de champions. Sufriendo, eso sí. Hay que sufrir para merecer. El reojo a la prensa mundial me deja más helado que un frigopié. La mujer de Berlusconi recurre su divorcio (querrá pasta la muy víbora), Obama se une a los recortes de las pensiones de los "yayos", el ministro del Interior español ordena acordonar las casas de los políticos españoles en un día en el que se fuga el dinero en Chipre, siguen llorando en Málaga y nos damos cuenta de que ya nada es seguro, viendo a Apple caer puestos en el ranking de la tecnología punta, tras la muerte del mago Steve Job.

Y aquí, a tres mil kilómetros de ese país de nariz picuda, las cosas marchan... se mantienen... y si evolucionan, casi siempre suele ser para mejor. Maslow, en un intento por girar lo girado, nos tachaba de habernos convertido en autoevolucionadores. Evolucionar significa seleccionar y, por tanto, escoger y decidir, y eso significa valorar. Las personas de las que he elegido rodearme... en Sofía... son de "24 kilates". Buenas noches!!!!

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