Volvemos a ser una generación de emigrantes. Las maletas ya no son de carton pero se hacen con la misma finalidad que en los 60. Sobrevivir. Por desgracia, no somos Labordetas aventureros del placer, pero tratamos de poder decir siempre que "nunca quisimos vivir de brazos cruzados"
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sábado, 11 de mayo de 2013
Día 49 en Sofía "el monje"
Tres y media de la madrugada. Necesito dormir pero no sin antes asomarme a este rincón personal, que por cierto, cada día es más visitado. Va por 6300. Aún hasta las diez mil, apelo a la pura casualidad. No cesa en mi teléfono el prolongado goteo de fotos desde la boda de Migue y Carmen. Menudo festtín se debe de estar cociendo. Y no sabéis cuánto me alegro en la distancia. Once de mayo, el día que se plantó en este mundo el incombustible pintor Salvador Dalí allá por 1904, mi amigo Migue ha puesto fin a su largo periodo de soltería. Bien aprovechado y lleno de eventos, festejos y jornadas intensivas aptas sólo para personalidades inagotables.
Si la novia me comentó que se despertaba a las 7 para ir a la "pelu", Gladstone 51, por contra, amaneció tarde y lenta. Mi cuerpo y mi mente me pedían descansar sin reloj tras estos largos días. A las doce el primer retrato del protagonista de hoy, ya vestido con su traje de luces y presto para encaminarse al altar del brazo de su madre. Se me han caido dos lagrimones que hasta mi compañero pensaba que ocurría algo. Vaya semanita de emociones!!!. Suerte que el punto y final, ha sido algo tan positivo como una boda, en la que me consta, sólo han estado los mejores.
En ese reojo y pulso diario que mantengo con la provincia de mis amores, a la que aún en la distancia sigo de cerca, leo que están siendo tantas las toneladas de hachis incautadas, que en los periódicos, el Concurso de Patios se está viendo obligado a desfilar a rebufo. Nuestro Córdoba Club de Fútbol muere en su último intento por meterse en la liguilla de ascenso y tras el 3-0 del Molinón, Esnaíder tendrá que esperar a la próxima temporada para convencer a los aficionados blanquiverdes. Las protestas contras las privatizaciones avanzan y esta mañana el paseo de la Victoria amanecía cortado por los manifestantes. Y todo ésto en el día que Canaletas celebró su Liga y Javier Arenas trata de autoconvencerse de que hay tiempo para cumplir el programa electoral. Ironías de la vida... como nada puede ir a peor... Hay tiempo para todo!!!.
... Tiempo es lo que escasea para los millones de búlgaros que están llamados a votar dentro de unas horas. Los colegios electorales están listos y las medidas de seguridad, ya desde esta noche, se apreciaban en la calle. Mi exclusivo deseo... una jornada electoral tranquila!!! mi quiniela y resultado??? Ni izquierda ni derecha. Me decanto por aquello que sea más positivo para este país y le sirva como trampolín para enlazarse a Europa y progresar en todos los aspectos en los que actualmente existen deficiencias. Una pretensión ésta, que estoy seguro comparten conmigo muchos de los ciudadanos que mañana se acercarán hasta las urnas a depositar, no sólamente un voto, si no un trozo de esperanza en busca de una permuta que les brinde la posibilidad de usufructar todo su potencial.
Con poco más que destacar, voy a colocar mi oreja en la almohada y cerrar mis ojos que dentro de un rato nos vamos a visitar el Monestario de Rila. Aunque mañana os hablaré largo y tendido de este lugar, Os pongo en antecedentes... El Monasterio de Rila fue fundado en el siglo X por San Juan de Rila. Está situado en las montañas del mismo nombre, en la parte occidental de Bulgaría, a más o menos 120 kilómetros de la capital. Las coordenadas son 42° 08' 10 N 23° 20' 40 E en un sitio espectacular en el profundo valle del río Rilsk. Su historia está ligada ampliamente a San Juan de Rila, a quien mañana os presentaré porque su biografía es digna de una página en monopolio de mi blog. Nos esperan dos horas y media de disfrutar de un nuevo deporte, alpinismo en bus, manteniendo la esperanza intacta de que el transporte de mañana no haya celebrado ya su veinte cumpleaños. Y para despedirme, únicamente recalcar el intensivo curso de planchado que ha realizado esta tarde el señorito Cobo, que hacendoso!!. Cuando los residentes del monestario le echen el ojo, con esa cortesía, ese porte y esas "manitas" que le caracterizan, son capaces de convertirlo en "El Monje".
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