Día 39 en Sofía "la pasión búlgara"

Día de Santa Paciencia, 1 de mayo, día del trabajo, y paradójicamente festivo en casi todo el Planeta, el Barça no podía ser menos y sumarse a esa vagancia colectiva que supone un dia feriado en época que atisba ya siesta y cervecita fresca.
La ausencia de Leo enfrió mucho los ánimos de un Camp Nou lleno con un equipo en el que pareció que nadie creyó en la remontada. El Barça se mostró impotente para intentar, siquiera, ganar el partido ante un Bayern impresionante que les goleó 0-3. ¿Que harán con el Sr. Jupp el año que viene? Le van a llover las ofertas de los banquillos de media Europa. A destacar el físico de Robben. Memorable!!!.


Quedó ensombrencido el "sí se puede" en el feudo azulgrana, al igual que en las manifestaciones por toda Andalucia, lema acompañado de un "pero no quieren" que reparte las culpas de la situación actual de la comunidad a todos nuestros políticos sin excepción. Mientras tanto, y por desconocimiento masivo del panorama español, y causas evidentes de desesperación aguda, siguen acercándose inmigrantes hasta las costas andaluzas, en un día en el que la prensa nos plantea la pregunta de si ahora debemos creer a Miguel Carcaño... inaudito!!!. Me quedo con la única noticia buena que puedo leer, desde la distancia, en este día no laborable. El comienzo de nuestro mayo cordobés con la popular Batalla de las Flores. Hoy mis palabras llevan destino a mis amigos sofianos... os cuento...

 

En el Paseo de la Victoria de Córdoba se libra cada 1 de Mayo una batalla muy especial. Las armas no son de fuego, sino de flores, y los que disparan en nada se parecen a bandoleros. Se trata de romeros y peñistas que dan la bienvenida al mes festivo por excelencia de esta capital, el de mayo, arrojando a la gente hasta 120.000 claveles de papel que les son devueltos para que la fiesta pueda continuar.

La batalla de las flores, en la que participan hasta catorce carrozas, sirve para inaugurar el mayo festivo cordobés. Y lo hace, además con todas las miradas puestas en sus patios, que abren sus puertas al público por primera vez convertidos ya en Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. El festival es, sin duda, este 2013, la celebración más importante de todas cuantas tienen lugar en estos 31 días.

Correcto y corriente 1 de mayo en el que he recordado a aquellos miles de trabajadores de Chicago, que en el año de 1886, cansados de ser explotados, decidieron defender sus derechos laborales y se lanzaron a las calles para exigir: Una jornada de trabajo de 8 horas, tener el derecho a la huelga, a la libertad de expresión y asociación, así como a tener un trabajo y un salario justo. Muchos de ellos murieron en el intento.

Tema con más arraigo, personal y actual, es mi preparación para la Semana Santa en Sofía. Ya tengo en mi poder mi huevo de color rojo, imitación en madera, pero bonito regalo que quiero conservar hasta hacerme con el auténtico que guardaré durante todo el año esperando esa buena suerte que todos añoramos. No se puede pedir más a este 1 de mayo, en el que sólo me queda felicitar a aquellos españoles que aún no pertenecen a esa marea de 6 millones de individuos en edad activa que no consiguen encontrar un empleo, animar, a que lo hagan, a quienes siguen cavilando en la idea de expatriarse, agradecer a los Iniesta y Cía por todos estos años de buenaventuras, y mandar energía positiva a aquellos que entonan con fuerza el himno de la reivindación para tratar de moldear esta situación que nos devora. Miércoles Santo-ortodoxo... "la pasión búlgara"