Volviendo como acostumbre al título de este día, el inadaptado habrá que buscarlo en otro lugar, de momento, en el número 51 de la calle del Gatewai Company, no podrán encontrar a ninguno.
domingo, 31 de marzo de 2013
Día 8 en Sofía "El inadaptado"
Se retrasó el amanecer "sofiano", al menos en la calle Gladstone 51, donde la noche tuvo tintes de longevidad desteñidos con una apresurada retirada. Ganó nuestro Córdoba y nosotros que no perdimos detalle a través del Stream "conexión Baena - DesposorioVL" que nos facilitó la posibilidad de poder verlo. Goleada amplia al Sabadell que le mantiene en la pelea por los puestos de arriba. Aplaudimos a Abraham Paz como casi todo el Arcángel, con excepción de nuestro Kiko Eloy Narváez, quien no debe guardarle demasiada estima al ahora jugador del Sabadell. Nuestro habitáculo despertaba dibujando similitudes a un hogar para gallinas. Nos ha tocado asumir la responsabilidad de que el "italian job" se alargó. Limpieza a fondo y a empezar de cero.
Hoy comparto con quienes me leéis, el concepto de la comida en Sofía. Un auténtico placer, que mi compañero Cobo y yo estamos convirtiendo en ritual habitual de mediodía. Estamos más enganchados a la ensalda Shopska que Falete a los pasteles. En Bulgaría hay muchos tipos de ensaladas, y esta es una de las más típicas y consumidas. En búlgaro [Шопска салата, Šopska salata], proviene de Shopi en la región de Sofía, donde se cree que se desarrolló esta receta originalmente. Se realiaza a base de tomates, pepino, cebolla, pimiento -crudo o asado- y queso blanco -tipo sirene o feta-, todo ello cortado en dados. Se condimenta con aceite -de oliva o cualquier otro aceite vegetal y vinagre. Suele tomarse como entrante o primer plato, acompañada del licor tradicional, rakia. En nuestro ritual particular, Cobo inaugura con la aceituna negra y yo aliño.
La cocina búlgara (en búlgaro: българска кухня) os sorprendería. Es representativa de la gastronomía de los balcanes, teniendo trazas de la cocina turca, la cocina griega y la cocina árabe. Debido a su clima algo caluroso se puede decir que hay una abundancia
relativa y diversa de vegetales y frutas propios de la tierra. Sorprende en cada restaurante la gran cantidad de fruta y productos frescos así como vinos y licores tradicionales. El precio, para el visitante constituye un aliciente importante, ya que se pueden encontrar menús o incluso comidas a la carta por un total de 4 o 5 euros, lo que son unas 9 o 10 levas. Entre nuestros platos predilectos... la Tarator, el queso amarillo Kashkaval o la mish-mash, que da nombre este blog y que mañana os explicaré. Y como olvidar... EL YOGURT!!! Casi todo lleva yogurt!!!! Genial.
Volviendo como acostumbre al título de este día, el inadaptado habrá que buscarlo en otro lugar, de momento, en el número 51 de la calle del Gatewai Company, no podrán encontrar a ninguno.
Volviendo como acostumbre al título de este día, el inadaptado habrá que buscarlo en otro lugar, de momento, en el número 51 de la calle del Gatewai Company, no podrán encontrar a ninguno.
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Buenos dias blogero culinario. MIlagros y yo estamos encantados con la descripción tan elaborada que nos haces a diario de la cocina búlgara, peero....a ver cuando nos describes la forma de preparar los tan de entrada, ricos, sabrosos y exquisitos platos tradicionales balcánicos, mas que na pa probarlos por aqui.
ResponderEliminarMe voy a permitir la licencia de proponerte el titulo del siguiente blog, "tribulaciones de un hombrecito y su lavadora". A ver si Eloy, que ya conoce a un cientifico de bata blanca, que habla sevillano, le pregunta el funcionamiento de ese sofisticado electrodoméstico, que solo se utiliza en la estación espacial, que creo se llama LAVADORA, y que desde este pequeño trocito de Europa nos vemos incapaces de explicar a través de wassap.
Bueno pandilla, Milagros y yo os mandamos un fortisimo abrazo y, de parte de ella....un besote para el chiquitín.
P.D: ya nos contarás en otro blog en que estado a quedado la ropa despues del pseudolavado. Nuestras plegarias irán orientadas en esa dirección, sobretodo para que, la ropa no solo la pueda utilizar Eloy`, por aquello de la reducción drastica del tamaño de las fibras textiles.