En 2004, John Moore dirigía una película que llevaba por título mi entrada de hoy. Sabemos la diferencia entre vuelos, y vuelos. Vuelos que simplemente elevan a una multitud de personas sobre las nubes, y vuelos q logran cambiar el alma de una persona. Este es el espíritu del Ave Fénix, de esa resurección entre peligros sobre el desierto de Gobi, que lejos de ser anacrónica, se convierte, en ocasiones, en un ejemplo para superar los obstáculos de nuestros vidas.
El día del reecuentro, el día que esperábamos, el día de usar nuestras tarjetas de embarque, para de repente, dejar de ser ciudadanos de un lugar, para transformarnos, únicamente, y por unos meses, en ciudadanos del mundo.
Trataba siempre mi amigo D. Arévalo, en un intento por abrir mi mente, que salir, y cambiar tu lugar de origen o de residencia te enseña a descubrir y apreciar el mundo que se ha creado ahí fuera, la verificación de la existencia de nuevos lugares, insólitos, aquellos que siempre hemos visto únicamente en los libros de bachillerato. Lugares con nuevas experiencias, con nuevos personajes, nuevos escenarios, donde esa obra que es tu vida, puede tomar un nuevo sentido. Pero a la vez, paralelo a la grandeza, está la sensación de diminutivo. Que pequeños somos!!!.
La llegada a la aeropuerto de Sofía fue de lo más atípica, fue construido en 1936, y aunque actualizado, su situación supone un enclave prácticamente inaccesible entre las montañas de Sofía. La idea de ello, en aquel entonces era ocultar al enemigo dicho enclave. Una vez dentro, la policía Búlgara te hace varios controles de seguridad, siempre con su sonrisa (ironia pura) en la cara y su gesto de amabilidad (ironía de nuevo). Para finalmente decir un "Ok yao (chao)", más seco y más triste que un panecillo de cortijo en pleno mes de agosto.
Al salir y coger las maleta nos esperaba Estiliana, cuyo nombre intuíamos que no provenía de Castilla y León, asi que mediante nuestro inglés bilingüe y nuestro "startis" (hola en búlgaro), nos acompañó en taxi hasta el apartamento. Vivimos en la calle William Gladstone, el primer ministro del Reino Unido.
¡Disfruta de tu experiencia en el extranjero! Cada nuevo día es una oportunidad, y en este caso, no es una frase hecha. Porque realmente te ocurrirán dificultades, historias y momentos únicos que compondrán una de las etapas más felices de tu vida. A ti, que te gustan tanto las citas célebres, te dejo una del enorme periodista polaco Ryszard Kapuscinski, que tanto viajó para contar lo que vió: "El sentido de la vida es cruzar fronteras". ¡Suerte!
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